El Cuarto Poder

Noticias de Lobos

https://www.solumedia.com.ar/radios/6498/index.html

https://www.solumedia.com.ar/radios/6498/index.html

Actualidad Información General Policiales Política SOCIEDAD

¿EN SERIO VAN A REEMPLAZAR A RUSTOM POR GALLO?

MEDIOS LOCALES, EN LOBOS, IMPULSAN A PABLO GALLO, COMO NUEVO SECRETARIO DE SEGURIDAD.

Medios locales adictos al municipio, lanzaron al ruedo el nombre de Pablo Gallo, como probable reemplazo de Julio Rustom, en la Secretaría de seguridad comunal.

Realmente una verdadera provocación a la ciudadanía lobense, Gallo es reconocido en el ambiente de la seguridad debido a que estuvo en el inicio de la administración de Jorge Etcheverry. Posteriormente fue destinado a la ciudad de Saladillo, donde participó, según medios nacionales, del escandaloso caso donde asesinaron a la maestra jardinera Marisol Oyhanart.

¡EN SERIO EL MUNICIPIO HABLA DE RECAMBIOS CON ESTE TIPO DE PERSONAS!

 

Marisol Oyhanart fue asesinada el 14 de abril de 2014

Dice La  Nación:

ADN del crimen: el archivo fantasma de un comisario

 Marisol Oyhanart tenía 38 años

“En los momentos posteriores al homicidio de la maestra jardinera, un grupo de siete policías, entre los que figuran tres comisarios, borraron imágenes de una cámara de seguridad de un taller de chapa y pintura, en la que habría quedado registrado el paso del automóvil del empresario que acosaba a Marisol, desaparecieron los lentes, una calza, las zapatillas y el celular de la víctima. También se modificó la escena del hallazgo del cuerpo. Sin embargo, ninguno de esos policías quedó preso.”

“En los momentos posteriores al homicidio de la maestra jardinera, un grupo de siete policías, entre los que figuran tres comisarios, borraron imágenes de una cámara de seguridad de un taller de chapa y pintura, en la que habría quedado registrado el paso del automóvil del empresario que acosaba a Marisol, desaparecieron los lentes, una calza, las zapatillas y el celular de la víctima. También se modificó la escena del hallazgo del cuerpo. Sin embargo, ninguno de esos policías quedó preso.

 

Según consta en el párrafo “e” del informe elaborado por un grupo de detectives del Gabinete de Homicidios de la Dirección de Investigaciones de La Plata, la principal sospecha sobre el presunto autor del homicidio de Marisol apunta a un empresario agropecuario propietario de campos en Saladillo y Bolívar, examante de la víctima. Los policías llegaron a esta conclusión después de revisar las pruebas incorporadas en el expediente que se instruye por el asesinato de la maestra jardinera.

Marisol estuvo cautiva, en un lugar que nunca se determinó, y la asesinaron. El asesino puso en evidencia su perfil sádico, al quemar a la víctima con el encendedor de un automóvil; esa quemadura quedó marcada en la calza y en la piel de Marisol. Pero la calza, que hubiera permitido a los peritos determinar la clase de vehículo al que correspondía el encendedor utilizado para torturar a la maestra jardinera, desapareció.

“Estoy indignada por no haber recibido respuestas de la Justicia después de tantos años seguimos igual”, expresó Celene, una de las hijas de Marisol. En coincidencia, su hermana, Aylén, agregó: “siento mucha indignación por cómo actuó la Justicia”

El análisis del humor vítreo de la víctima estableció que la maestra jardinera fue asesinada entre de las 21 del 14 de abril, casi cinco horas después de que la vieran con vida por última vez y las 2.30 del día siguiente. Esto significa que el lugar del hallazgo no fue la escena primaria del homicidio.

Marisol salió a caminar el 14 de abril de 2014, minutos después de las 15.30. Su desaparición fue denunciada dos horas más tarde, cuando no concurrió al jardín de infantes a retirar al menor de sus tres hijos. A partir de ese momento, familiares, amigos de la maestra jardinera, policías, bomberos, personal de Defensa Civil de la municipalidad de Saladillo y vecinos comenzaron la búsqueda de la mujer.

Pero el rastrillaje se interrumpió durante la madrugada siguiente. Uno de los sectores que se había revisado fue un área de taperas a 15 cuadras de la casa de la víctima. El cuerpo fue hallado a las 8.30, tres horas después de que suspendieran la búsqueda, en un lugar que ya se había rastrillado.

Pocas horas después de la desaparición de Marisol, el mencionado empresario agropecuario, asesorado por un grupo de policías de la seccional de Saladillo, se presentó a declarar como testigo para expresar que era amante de la víctima y así apuntar las sospechas sobre el esposo de Marisol para responsabilizarlo de un supuesto homicidio cometido en el contexto de violencia de género.”

Aquí el link de la nota completa, aunque googleando “El caso del asesinato de Marisol Oyhanart”, se puede conseguir el seguimiento completo.

 

https://www.lanacion.com.ar/seguridad/adn-del-crimen-el-homicidio-de-la-maestra-jardinera-marisol-oyhanart-quedo-a-un-paso-de-la-impunidad-nid03022024/

 

 

Policías bonaerenses habrían participado en el encubrimiento del homicidio Guadalupe Aizaga Enviada especial – LA NACION

Sin embargo, esta maniobra fracasó. Sergio Rachit, el esposo de Marisol demostró dónde estuvo en el momento de la desaparición de la víctima. Entonces, a partir de la presentación de una serie de pruebas y testigos nadie sospechó del marido de la maestra jardinera.

Ante la imposibilidad de poder culpar al esposo de la víctima, el grupo de siete policías que participó del encubrimiento del homicidio de Marisol buscó otro sospechoso. Los efectivos intentaron instalar la hipótesis que apuntaba a Johnatan Bianchi como presunto autor del homicidio que conmocionó a Saladillo.

Los policías presentaron a Bianchi, que tenía antecedentes por robos y era un viejo conocido de los policías, como supuesto autor del crimen de Marisol. Con los indicios aportados por los uniformados, la primera fiscal del caso, Patricia Hortel, dispuso la imputación de Bianchi. Además, la representante del Ministerio Público solicitó la detención del acusado y ordenó que sea sometido a una rueda de reconocimiento.

Pero ninguno de los testigos que fueron llevados a la rueda de detenidos reconoció a Bianchi como el sospechoso que, supuestamente, había sido visto a las 16.30 cuando merodeaba por la tapera, donde al día siguiente fue hallado el cuerpo de Marisol. Debido a que nadie reconoció a Bianchi en la tapera en el momento en el que la víctima estaba en el lugar, el abogado que lo defendía, Rubén Carrazzone pidió su excarcelación. El juez de Garantías César Melazo aceptó la solicitud del letrado y dispuso la libertad de Bianchi que, aunque nunca más fue mencionado en ninguno de los más de veinte cuerpos del expediente figura, todavía, como el único imputado. Melazo fue condenado en marzo del año pasado a 7 años y 10 meses de prisión por integrar una asociación ilícita con policías bonaerenses y barrabravas.

Los peritos determinaron que el lugar del hallazgo del cuerpo no fue la escena primaria del crimen

Entre los secretos que se ocultan en el voluminoso expediente figura la declaración de un testigo de identidad reservada que afirmó que la madrugada que Marisol fue asesinada, un grupo de policías, a los que identificó por sus apellidos llegaron en la camioneta del dueño de una agencia de automóviles usados de la zona a la enfermería que funcionaba como clínica tumbera.

Los funcionarios judiciales allanaron la clínica dos años después del homicidio pero no hallaron ningún rastro del aro que le faltaba a la víctima.

Dicho centro de atención pertenecía a un policía exonerado de la fuerza de seguridad provincial. Según el testigo, “los policías y el enfermero tocaban a Marisol para tratar de establecer si estaba con vida. Cuando advirtieron que no tenía signos vitales, taparon su rostro con un buzo y cargaron el cuerpo en la misma camioneta”.

A esa hora de la madrugada, la búsqueda de Marisol había sido suspendida. Entonces, los policías y el amigo del empresario se dirigieron a la zona de taperas, que ya había sido rastrillada y abandonaron el cuerpo. Las marcas de arrastre y el goteo de sangre confirmaron que el cadáver de Marisol fue colocado en ese lugar para que sea encontrado. Tal como ocurrió esa mañana, a las 8.30, hace casi diez años.