Murió NORA CORTIÑAS, la madre de todas las luchas, de todas las marchas, la primera que siempre estaba en la fila contra las injusticias.

Luego de una internación en el Hospital de Morón, tras haber luchado por encontrar a su hijo desaparecido, sin descanso,  desde el primer día.

Su lucha, su vida, fue un ejemplo de disciplina humanitaria para con todos.

Siempre sostuvo que su hijo desaparecido Carlos Gustavo Cortiñas  lo habían alojado en la Mansión  Seré, la misma donde ayer, miles de personas la despidieron, en ese espacio recuperado, de tanto horror en épocas difíciles de nuestra patria.

Hoy Nora, descansa en paz, tal vez feliz de saber que se encontrará con su hijo en un mundo mejor a este, por el que lucho incansablemente para transformarlo e un país mas equitativo, sin tanto oprobio entre semejantes.

Imposible describir los sentimientos hacia una persona que lo dio todo, hasta su propia vida, luchó hasta el último minuto.

Se fue con la foto de su hijo, camino a encontrarlo en busca del premio solo DIOS puede dar, descansar por la eternidad junto a quien amó y busco en este mundo

Foto de portada P12