Un conductor se llevó por delante un deck

Otro deck fue impactado por un automovilista. Recordemos que éstos son de los que se aceptaron usar luego de pandemia y que solo fueron autorizados por la buena voluntad del secretario de Gobierno, y que deberían haber sido luego reglamentados por una ordenanza.

Por aquellos días, donde todavía se vivía una situación crítica, la autorización de estos espacios, aquí y en toda la Argentina, se propagó en forma exponencial.

El Concejo Deliberante se abocó, por aquel entonces,  a trabajar sobre una ordenanza que debería tener en cuenta algunas consideraciones al respecto. Con la ordenanza promulgada, Ordenanza 3128, se solicitó a TODOS aquellos que tuvieran un espacio sobre la calle, en la línea de estacionamiento, que presentaran al Municipio los antecedentes y detalles que se solicitaba para que Obras Particulares estudiara las particularidades de cada uno y emitiera un dictamen, para de este modo el DEM actuara en consecuencia.

Es lo que sucede en esta bendita ciudad por parte de quienes la gobiernan: no actúan en consecuencia, sino como consecuencia, es decir una vez que se produce el incidente y no como modo de precaución.

El accidente, distracción o como se lo quiera llamar es por las consecuencias de no haber sido individualizado, NI TAN SIQUIERA HABRÍA SIDO SOLICITADA SU INSTALACIÓN.

Por otra parte, aquellos que SÍ lo hicieron, es decir, cumplieron los requerimientos al respecto, aún esperan la comunicación por parte del DEM, sobre los destinos de los informes respondidos.

Quienes saben de esto, dicen que estos expedientes se encontrarían apilados en la Dirección de Obras Particulares, durmiendo el sueño de LA FALTA DE GESTIÓN.

Lo llamativo de todo esto es que la LEY Nacional de Tránsito es muy específica respecto de interponer obstáculos en las calzadas por donde circulan los vehículos. Serán estos decks un caso de obstaculización. Un ejemplo claro de cómo evitar estas circunstancias es el modo en que  CABA ha reglamentado estas construcciones.

Imagen de portada: cortesía de la web LTVN