En horas de la mañana, se realizó la ceremonia por el 223 aniversario de la ciudad de Lobos.

Como es costumbre, la misma se desarrolló en la Parroquia de la ciudad, donde autoridades presentes y público en general, se hicieron presente.

El Intendente depositó en la Tumba de  José Salgado una ofrenda floral, mientras que la Pte. del Concejo Deliberante hizo lo propio en la Tumba de Pascuala Rivas.

El sacerdote Roberto Giovanettone manifestó dirigiéndose al intendente Etchevrry: «cuántas inquietudes tendrá usted para todo el pueblo, responder a los más pobres y necesitados, creer es confiar que hay un Dios que sabe qué es lo mejor para cada uno de nosotros».

“Hoy nos toca pedir por José y agradecer ese sueño que tuvo de fundar un pueblo, 223 años de historia, pasaron muchas personas construyendo ese pueblo, y ojalá sigan pasando muchos intendentes, funcionarios, sacerdotes, fieles, hermanos del pueblo, para seguir construyendo la ciudad de Lobos”, agregó.

Por otro lado el Intendente dirigió un tibio saludo para  para los bomberos Voluntarios de Lobos, en su día: “a nuestros orgullosos bomberos los define una sola frase, hacer el bien sin mirar a quien”.

Mientras que para los habitantes de Lobos dijo:  «a todos los lobenses, hoy es un día de fiesta, de recordar, de acordarse de quienes los fundaron, de quienes hicieron esto posible, los que conocemos y los anónimos, 223 años pasaron para llegar a hoy, para que ese sueño de un pueblo, hoy una ciudad, sea cumplido con el esfuerzo de todos, y sobre todo porque esto está hecho con buena gente”, agregó luego, “A veces las malas noticias están al tope, pero los buenos y anónimos son los que construyen, los que hacen, los que le dan alma a esto y hacen que esta ciudad siga siempre para adelante.

Un nuevo aniversario de Lobos, el número 223 desde el momento de su creación.

Un hermoso día a pleno sol que nos invita a reflexionar.

¿Es feliz un día donde el olvido del estado municipal es por demás evidente?

¿Se puede ser feliz cuando los referentes sociales se hacen cargo de asistir a un centenar de chicos con alimentos calientes, que el estado municipal ni los tiene presentes?

¿Se puede ser feliz, cuando el Estado Municipal, no cumple con los mandatos judiciales de proporcionarles el agua que los envenena día a día un poquito más?

¿Se puede ser feliz, cuando a la fecha es el único Municipio de los 135 de la Provincia que no ha construido NI UNA SOLA VIVIENDA SOCIAL?

¿Se puede ser feliz, cuando la seguridad, en cuanto lo que dependa del Estado Municipal, ES UN DESASTRE?

¿Se puede ser feliz, cuando los funcionarios se pasean en camionetas de alta gama, en desmedro de los ciudadanos que no tienen un sistema de trasporte adecuado en el Municipio?

¿Se puede ser feliz, cuando las calles de los barrios se encuentran colmadas de basuras, pastizales, roedores, ruidos molestos de una noche sin control, ciudadanos que han comenzado a dormir a la intemperie porque no tienen donde hacerlo, sin que el Municipio arbitre medios que los contenga?

Los referentes sociales que asisten a muchos ciudadanos en Lobos, viven en el mismo lugar precario de hace años, CUALQUIERA PUEDE CONSTATAR esta verdad, mientras que algunos funcionarios que nos gobiernan llegan al poder con las suelas gastadas y se retiran con unas cuantas SA, y mucho dinero en sus cuentas bancarias.

Ojalá que este 2025, podamos ser FELICES plenamente y sepamos elegir en forma conveniente que dejen SUS EGOS en sus casas, para ponerse la camiseta de Lobos para poder encaminarnos definitivamente a una mejor ciudad.