No una, ni dos, ni tres… nueve veces entraron a la vivienda que construye un vecino en Barrio Vinelli.

Manuel Grehan, de calle Los Robles 13, esquina Dorrego, comentaba ayer por la tarde a EL CUARTO PODER:

«La casa está en obra y, desde hace una semana, vivimos en constante zozobra. Primero fueron cosas de rateritos, podríamos decir, algunos fierros y uno que otro ladrillo, pero el caso es que se cebaron y arriaron con todo: herramientas, bolsas de cemento, de pegamento, cajas de porcelanato y demás. Hice la denuncia policial como corresponde, nada puedo decir de la atención de la Policía, siempre fui bien atendido.

Ayer por la noche, un rondín demoró a unos sujetos que merodeaban la casa nuevamente pero, como no tenían nada encima y al estar fuera de la propiedad, tuvieron que soltarlos.»

Nos dice Manuel que esperan las imágenes de las cámaras de un vecino, las que recién anoche revisarían. La Policía cree que una vez que las revisen la identidad de los «cacos»  definiría la cuestión, aunque mucha esperanza no tiene, ya que la Justicia los dejaría nuevamente en libertad. Se piensa que uno de los probables involucrados sería alguien con frondoso prontuario, de mucho riesgo y recién salido en libertad.

Hace poco, fue la seguidilla de hechos en el barrio que sigue a Vinelli, Del Carmen. Hubo reunión con autoridades, algunas palabras  y algún compromiso a futuro. Las patrullas pasan varias veces al día. Los vecinos ante cualquier cara o automóvil extraño, llaman y la seguridad responde, pero el peligro latente de sentirse observados hace mella en la psiquis de los barrios, máxime, cuando los hechos se repiten una y otra vez.

Son muchos los temas que acosan a barrios que han explotado en su desarrollo: los ruidos de las motos sin control, el exceso de velocidad en calles internas, las entraderas hacen que sea necesario que las autoridades municipales desarrollen una gestión acorde a lo que pregonan. Si bien es cierto que la fuerza policial depende de la Provincia, existe una Secretaría de Seguridad municipal. Es la misma Secretaría que, junto al intendente actual, avaló la disposición de la ex Gobernadora y del ex Ministro Ritondo de disolver Las Escuelas Policiales de Los Municipios,. Lobos fue la primera ciudad, luego vinieron todas a nivel Provincial.

Hoy, el Municipio ha invertido en un parque rodante nuevo, móviles para tránsito, camionetas para sus funcionarios, etc. etc. No está mal que así sea, pero cuando el ciudadano ve que algunos de ellos sirven para dar vueltas y más vueltas por el centro de la ciudad piensa, si no podrían ser utilizados para controlar los oscuros barrios en la noche. La oscuridad, otro de los temas recurrentes.