En las últimas elecciones municipales, la ciudadanía de Lobos eligió, entre otras cosas, por primera vez un candidato de LLA. Ocupando un escaño en absoluta minoría, eso dijo, aunque en todas las votaciones que se han dado hasta ahora, nunca se manifestó en disidencia junto a los miembros del bloque opositor demostrando, cada vez que puede, su  efusividad, al decir de las fotos que se publican, de su actitud con el Intendente Etcheverry.

En su accionar en el Consejo Deliberante no se conoce, hasta la fecha, ningún proyecto presentado que beneficie a los contribuyentes de Lobos.

Ahora bien, en estos días, y después de haber estado, sin pronunciar palabra, en la reunión de los vecinos realizada en Las Chacras,  se inundan las redes con propuestas que trataremos de analizar en esta nota:

Llamativo es que quien ostenta el cargo de Concejal, ungido por el voto popular, pueda esgrimir un comentario solo comparable con  expresiones de otro aliado de su fuerza a nivel nacional.

El «concejal», parece olvidarse que su trabajo, rentado con los dineros de los contribuyentes lobenses, es LEGISLAR para prevenir con las herramientas que existan y las nuevas que él en su trabajo legislativo pueda proponer.

Esto de barrer, hacer desaparecer, meter bala  a los delincuentes, y exterminar semejantes, es una expresión que mucho dolor ha causado a los argentinos.

Con esto, este cronista no quiere hacer una oda  a los delincuentes, pero sí decir que las cosas no se resuelven tan fácilmente con manifestaciones de este tenor.

Es aquí donde habría que detenerse, porque en realidad  la publicación de este concejal ofende al raciocinio de quien pueda tener acceso a su propuesta.

El punto 1 propone que el vecino realice patrullajes comunitarios, se supone que con móviles propios, poniendo en riesgo su vida. Nada más alejado de la idea de un Estado presente, que es el que debe velar por nuestra seguridad.

Para el puno 2, es indudable el desconocimiento de la realidad de lo que verdaderamente sucede frente a los contribuyentes que lo votaron confiando en sus promesas de legislar para que Lobos tenga un sistema de seguridad confiable. ¿Adónde quedó todo aquello?

En el punto 3, propone algo que ya existe, y a la luz de su funcionamiento, no está funcionando, obvio. La fuerza policial no responde con la premura del caso.

En el punto 4: Acaso, ¿no sabe el «concejal» que él es el representante de los vecinos ante el Ejecutivo y que es él quien debe dar la seguridad de que si los vecinos pagan sus impuestos es para que eso que él está proponiendo SE CUMPLA?

Punto 5: Por fin, algo que puede ser razonable pero debería interiorizarse sobre algunas normas existentes, que rara vez se cumplen, pero están.

Punto 6: Aquí el desmadre total del razonamiento, ausente de todas las publicaciones que se conocen de cómo actuar en una contingencia. Aprovechando sus buenas relaciones con el Ejecutivo, debería tener una charla con las fuerzas de seguridad.

Punto 7: El desconocimiento total de la situación de las zonas rurales, donde las propiedades están alejadas, a veces faltas de conexión satelital, donde las distancias entre tranquera y tranquera son considerables.

Punto 8: Si estuvo presente en la reunión de las Chacras, sin emitir sonido que delatara su presencia, se podría pensar que no fue el concejal Porcheda quien redactó esta gacetilla.

Sí queda expuesta su posición sobre las responsabilidades del Estado. La creencia en la destrucción del Estado y en que la ley del Talión debe prevalecer por ante todo. Nada más alejado de la realidad pero, ANTE TAMAÑAS MANIFESTACIONES EN CONTRA DE TODO EL SISTEMA EXISTENTE, EL ANIQUILAMIENTO DEL ESTADO  contrasta con su permanencia en éste, con el cargo de «concejal», cobrando, eso sí, mes a mes, ya vamos por el cuarto, su sueldo de concejal.

Como suele decirse al pie de todo escrito en los juzgados,

SERÁ JUSTICIA.