TODO LOSBOS SE PUSO CONTENTO CUANDO SE ANUNCIÓ UN CAMBIO DE PROPIETARIOS, SIN EMBARGO…

Como de costumbre, siempre la cadena se corta por el eslabón más frágil, en este caso, los empleados.

En toda fusión o transmisión de acciones de un grupo económico, siempre se protege al inversor y su sistema pero, al verdadero sostenedor de ese andamiaje, siempre se lo deja al último.

La salud, ese derecho inalienable del cuidadnos común parece que, otra vez más, se transforma en una trampa mortal para quienes trabajan denodadamente en este sistema. Cuando se cierran los tratos comerciales, los empleados suelen ser socios en el proyecto a desarrollarse, conforme sucede la marcha de la parte comercial, comienzan a ser solo socios en la problemática y en las pérdidas.

Sin embargo los trabajadores de todos los ámbitos, en este caso el de salud, terminan siendo vapuleados y dejados de lado por inversionistas que

Diana Eizmendi y Lucrecia Mansilla, fueron las voceras ante los medios.:

“estamos teniendo una problemática muy preocupante con el tema de los salarios, hace 6 meses que venimos cobrando mal”.

“Nosotros acompañamos y entendimos la situación de la llegada de un nuevo grupo propietario del establecimiento, nos dicen que el problema no es la plata pero no cobramos en tiempo y forma, terminamos percibiendo el dinero los 22 o 23, en diciembre tenemos las fiestas, el aguinaldo, es un mes complicado, hay gente que son sostén exclusivos de familia”, agregaron.

“No exigimos cobrar antes del día 5, pedimos que nos paguen el día 10, hace 6 meses que se nos desfasó el salario, nunca sabemos cuándo cobraremos la primera cuota y cuánto la segunda, no hay una fecha fija, nos deben un porcentaje de febrero, en las paritarias de febrero no tuvimos el aumento, los aumentos siguientes los tuvimos pero nos adeudan un 30 por ciento”, expresaron las delegadas.

Dijeron asimismo que “Hay prioridades para arreglos del sanatorio y pago de médicos que no cuestionamos porque todos venimos por el trabajo, pero nosotros quedamos como última opción, no somos un grupo de empleados complicados, nos hemos puesto la camiseta y merecemos ser tenidos en cuenta”.

“Hemos tenido muchas reuniones con los representantes de

Eizmendi y Mansilla plantearon que “hacemos reducción de 3 horas por turno, atendiendo sólo las urgencias, y luego evaluaremos otros pasos hasta que nos aseguren fechas concretas de pago de nuestros sueldos”.

“En anteriores gestiones tuvimos problemas pero nunca de esta magnitud, hoy tenemos cortadas también la obra social”, subrayaron.

“El paro no se levantará hasta que el pago no esté y se llegue al arreglo del aguinaldo y de los meses siguientes”, concluyeron con preocupación.

los dueños que no sabemos quiénes son, siempre mostramos predisposición y hemos entendido porqué cobramos en dos veces, pero nunca nos dieron certeza de fechas de cobro y así no podemos seguir”

Agradecemos la deferencia de Lobos 24 y su director Patricio Contrera.