El Cuarto Poder, invitó a la mencionada profesional, para que se haga cargo de una columna semanal en este medio
Con motivo del Día del Abogado, la Dra. Ferreyra
Antonella compartió unas palabras para reconocer y valorar la tarea de quienes cada día ejercen esta profesión:
29 de agosto. Día de las y los abogados.
En estos tiempos, donde el hambre duele y las injusticias sobran; las injusticias son la cruda realidad de quienes no llegan a fin de mes, de quienes no consiguen un remedio indispensable para la vida, o de quienes no tienen para darle de comer a sus hijos. Son jubilaciones que no se cobran, obras sociales que no cubren lo que deben, y padres que eluden sus responsabilidades.
La abogacía, en su esencia, no puede ser ajena a este dolor. La imagen del abogado de traje, inaccesible y sin ánimos de escuchar, se desvanece ante la urgencia de quienes sufren.
El verdadero rol del abogado es escuchar, acompañar y defender, no solo con el rigor de la ley, sino con la justicia social como brújula. En este camino, la empatía se convierte en la herramienta más poderosa. Ser abogado es, ante todo, ser un militante de los derechos del pueblo, un defensor de los más vulnerables.
En este día tan especial, quiero saludar a todos mis colegas, quienes día a día luchan por un país más justo. Un reconocimiento especial a los integrantes de mi estudio jurídico, y una mención particular a mis compañeros Martín Carriquiry y Silvio Canosa, quienes me han enseñado con su ejemplo que la profesión cobra sentido cuando se pone al servicio de la gente.
Feliz día a todos los abogados y abogadas que ejercen con conciencia y corazón.
Dra. Ferreyra Antonella.